Las altas temperaturas, sin duda, agitaron más de lo normal la cotidianidad de los habitantes de Bogotá en el inicio de año, con múltiples incendios forestales a causa de los números que llegaron a registrar los termómetros de la capital del país, de hasta 25°.
No obstante, no ha sido el intenso calor que paulatinamente opacan las tradicionales nubes bogotanas el único causante de actualmente estén entre 18 y 24 hectáreas de bosque quemadas por las 282 conflagraciones que ha registrado la ciudad en lo corrido del año.
Según Jorge Lemus, director del Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá, en los casi 300 incendios forestales se han registrado en la ciudad desde que inició 2016, aunque han incidido las altas temperaturas, han sido en su totalidad provocados por el ser humano, voluntaria o involuntariamente. Indicó en diálogo con caracol radio:
“Los incendios forestales no son espontáneos, o sea, por el hecho de que haga sol, no es espontáneo, no se inicia espontáneamente, sino que tiene que ver ya sea la iniciativa del hombre o cualquier cuestión que involuntariamente hayamos dejado, entonces para mi todos son por la mano del hombre”.
El director del Cuerpo de Bomberos de Bogotá expresó también la importancia de que los la entidad cuente con un helicóptero propio para atender este tipo de emergencias, pues fueron los helicópteros de la Fuerza Aérea Colombiana los encargados de recoger agua en el Parque Simón Bolívar y rociarla sobre el fuego que consumió los cerros orientales de la ciudad durante los cinco primeros días de febrero.
