Por Hernando Urrutia
¿Quién es ese satánico personaje, que emerge como un mandatario controvertido e incómodo para algunos de los tradicionales empresarios que se vieron sacudidos por unas iniciativas que despertó su intranquilidad?
¿Quién es ese instigador, camorrero que según un columnista “ha desafiado a los poderosos, a los gremios y al gobierno nacional?
Todo esto lo previeron algunos dirigentes y periodistas y lo advirtieron aún sin haberse posesionado, cuando con buen olfato detectaron un aroma adverso en las medidas que iba a aplicar, contraria a sus intereses.
Y empezó la campaña para generar antipatía hacia el gobernante capitalino cuyo nombre, Gustavo Petro, elogiaban por su valentía en el congreso, pero sentían inconveniente dirigiendo los destinos de la ciudad.
Es decir que cantaban como la canción llanera: con lo mío no se meta y lo empezaron a calificar de abanderado de la lucha de clases. En vista de ese calificativo nos pusimos a reflexionar sobre el tema y encontramos que “La lucha de clases» es un concepto o una teoría que explica la existencia de conflictos sociales como el resultado de un supuesto conflicto central o antagonismo inherente a toda sociedad políticamente organizada entre los intereses de diferentes sectores o clases sociales. Para muchos tal conflicto resulta un cambio o progreso político y social”.
O sea que Gustavo Petro es un adalid del proletariado provocando la rebelión con los recuperadores de materiales, los drogadictos dispuestos a integrarse de nuevo a la sociedad, aprovecharse del agua de los ricos para dársela a los pobres?
Sospechan sus enemigos que su actitud va hacia el castrochavismo y a entregar el país al comunismo? Seguramente estas medidas son un anticipo a lo que puede hacer desde la presidencia y hay que atajarlo.
Pero lo más simpático es que uno como periodista le pregunta a sus detractores y terminan validando muchos de los programas, cosa inexplicable… ¡inexplicable! Lo más fácil de descifrar es situando su plan de desarrollo en medio del conflicto de intereses.
Lo que no es tan amenazante lo mejor es elogiar la idea y minimizar el papel de su creador, pero lo que si hace peligrar sus intereses hay que desacreditarlo a como dé lugar, entonces surgen calificativos como “Improvisador” el culpable de lo malo de la ciudad, hay que abrirle investigaciones hasta por ir al baño, crear una opinión de una ciudad desbaratada, ¿por qué? No se sabe pero de todos modos es un caos.
Un caos que arreglará un recuperador, un salvador, un administrador.
Un recuperador? Para quién? No se dice claramente, pero mirando las propuestas de los aspirantes a la alcaldía, puede uno deducir, ¡queda de tarea!
Pero una vez pasadas las elecciones ¿el malo del paseo adivinen quién fue?
¿quién sigue despertando odios esta vez no de sus enemigos, sino también de “amigos” como artífice de sus derrotas, y que se dicen entre ellos algo así como la sentencia de la popular doña Florinda: ¡no se junte con esa chusma!
HERNANDO URRUTIA
Director de Programacion
Vientos Stereo
Director de Programacion
Vientos Stereo
Cel. 321 3275650