Ayer se oficializó la decisión de la Secretaría de Educación de acabar con el convenio entre el Distrito y la institución privada Fe y Alegría, en la localidad de Rafael Uribe Uribe. No solamente se canceló este convenio, sino que además el colegio desaparece como institución. No es una buena noticia, ya que alrededor de 700 estudiantes se quedarán sin educación. Lo sucedido, al parecer, es producto de negociaciones a alto nivel entre directivos nacionales y gobierno para finalizar las labores en este colegio.
La preocupación de los padres es no saber dónde ubicar a tal cantidad de alumnos. Las instalaciones de Fe y Alegría son muy buenas, que envidiaría cualquier universidad y hasta ayer servían para educar estos estudiantes. Hoy encontramos una gran oferta educativa en los colegios distritales, y los colegios que funcionaban con convenios al no recibir ayuda de la secretaría quedan en el limbo al no poder asumir sus propios costos. Los padres de familia quieren realizar una marcha, pero esta no aportaría mucho al ser una decisión ya tomada. La secretaría de gobierno anunció reubicación a estos alumnos, pero el rector de la institución lo desmintió, al decir que no había cobertura.
